¿Se van a retrasar mis paquetes en caso de sismo?

Ciudad de México, 12 de septiembre de 2024.- En México, la actividad sísmica es un riesgo latente que no sigue una temporalidad definida, y aunque los sismos más recordados han ocurrido en septiembre, es importante señalar que pueden presentarse en cualquier momento.

Esto porque el país se encuentra en una zona geológica activa, y esto convierte la posibilidad de un movimiento telúrico sea constante, lo que puede impactar en la gestión del comercio electrónico y las cadenas de suministro.

Frente a esta incertidumbre, muchas personas se preguntan: ¿qué sucede con los paquetes en tránsito durante un sismo? ¿Los envíos se retrasan o las firmas de paquetería y logística están preparadas para mitigar estos riesgos?

La respuesta está en infraestructura que los fourth party logistics (4PL) ofrecen para mantener sus operaciones funcionando, incluso frente a los imprevistos más desafiantes.

"Actualmente, desde la perspectiva de Mail Boxes Etc, las firmas de logística y paquetería tienen en los 4PL a un aliado crucial para estar preparadas para reaccionar ante este tipo de fenómenos en cualquier momento del año. Sin embargo, cuando ocurre un sismo, es inevitable que la cadena de suministro se vea afectada, al menos temporalmente, especialmente si hay daños en infraestructura clave, como carreteras o vialidades", señala Ilan Epelbaum, director general de Mail Boxes Etc en México.

El especialista señala que cuando se presenta un fenómeno natural como un sismo, la prioridad de muchas personas cambia. Los consumidores pueden pasar de estar preocupados por la llegada de un paquete a preocuparse por su seguridad y la de sus seres queridos. En estos momentos, es esencial que las empresas de paquetería y comercio electrónico adopten una postura empática hacia sus clientes.

Esto significa que las firmas deben ser transparentes y comprensivas con respecto a cualquier posible retraso que pueda ocurrir durante o después de un evento sísmico. Colocar al cliente en el centro de la ecuación significa entender que, en momentos de crisis, las prioridades cambian, y las empresas deben estar listas para atender esas nuevas necesidades, con comunicación clara y actualizaciones constantes.

Además, es relevante destacar que en situaciones adversas de este tipo, no todos los productos en tránsito son de entretenimiento o moda. Muchos envíos pueden incluir artículos esenciales como alimentos, medicamentos o equipos de apoyo para emergencias.

Aquí es donde el papel de los 4PL se vuelve crucial, ya que permiten a las empresas de logística reaccionar de manera ágil ante estas situaciones, reorganizando rutas, coordinando esfuerzos con otros proveedores y asegurando que los productos más urgentes lleguen a su destino sin retrasos considerables. Esta capacidad de respuesta es vital para entregar bienes esenciales en tiempo y forma, incluso cuando las circunstancias no son las más favorables.

¿Qué pasa con los pedidos en curso?

Si tienes un pedido en tránsito y ocurre un sismo, lo más probable es que la entrega pueda sufrir algún retraso dependiendo de la magnitud del fenómeno y sus consecuencias en la infraestructura local. Las empresas logísticas, sin embargo, han diseñado sus operaciones para enfrentar este tipo de contingencias de la manera más eficiente posible.

Desde la reubicación de centros de distribución hasta la optimización de rutas, estas prácticas apoyadas con tecnología de vanguardia abonan a que el cliente reciba el paquete lo antes posible.

En casos de sismos menores o en zonas donde la infraestructura no se vea gravemente afectada, es posible que el usuario no note ningún cambio significativo en los tiempos de entrega. Esto se debe a la capacidad de las empresas logísticas para ajustar su operación sin afectar gravemente los plazos estimados.

Los sismos representan un desafío constante para México, tanto para sus ciudadanos como para las empresas que dependen de una logística precisa. Sin embargo, los 4PL destacan como firmas con infraestructura y tecnología para enfrentar estos eventos, garantizando que, incluso en los momentos más difíciles, los productos lleguen a su destino.

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